REGIÓN
¿Le gusta la carne de monte? Investigan riesgo de virus y parásitos por su consumo

Animales silvestres como chigüiros, iguanas, patos y hasta serpientes son usados como alimento en la Orinoquia, un comportamiento que forma parte de la cultura de caza y dieta habitual en varias regiones apartadas del país, pero que por tratarse de fauna nativa –de la que no se controla su salud, dieta ni higiene–, representa un riesgo para la seguridad alimentaria, además de las alteraciones en el ecosistema. Por eso es esencial generar información que fortalezca las estrategias de vigilancia epidemiológica de la región, y para ello un grupo de biólogos indaga sobre los virus y parásitos de estas especies que puedan enfermar a los humanos.
Investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) y la Universidad Internacional del Trópico Americano (Unitrópico) en Yopal (Casanare), desarrollan un proyecto para identificar los agentes zoonóticos (microorganismos que puedan transmitirse de los animales al ser humano y enfermarlos) presentes en la “carne de monte”, como se le conoce popularmente a estos alimentos.
El trabajo, liderado por los docentes Lady Correa y Óscar Rodríguez, de Unitrópico, tiene como objetivo principal identificar virus y parásitos en muestras de los animales silvestres que consume la comunidad, recogidas en áreas rurales de Yopal y Paz de Ariporo. Entre los animales cazados, y de los que se han tomado muestras, se encuentran mamíferos como chigüiros, armadillos y zarigüeyas o “chuchas”; reptiles como iguanas, tortugas, boa güio y babillas; y aves silvestres como garzas y patos “pelones”.
Se busca identificar virus y parásitos
La profesora Nubia Matta, líder del grupo de Investigación Caracterización Genética e Inmunología de la UNAL, señala que “buscamos identificar parásitos y virus tan peligrosos para el ser humano como la influenza, bacterias como Leptospira y parásitos sanguíneos como Plasmodium, que comúnmente son portadas por aves y mamíferos silvestres; queremos identificar cuáles pueden estar provocando enfermedades por zoonosis en la región, y de qué tipo”.
“Luego de tomar las muestras de sangre, cloacales e hisopados orofaríngeos (secreciones nasales), las analizamos en laboratorio; aunque varios de estos estudios toman más tiempo que otros, en los hallazgos preliminares, en la sangre de zarigüeyas y chigüiros encontramos parásitos como tripanosomas, y en iguanas hallamos parásitos asociados con la malaria”, destaca la experta. Estos resultados subrayan la necesidad de continuar monitoreando y comprendiendo los riesgos de salud asociados con las prácticas alimentarias en los Llanos Orientales.
El proyecto no solo busca identificar los riesgos asociados con la manipulación de fauna silvestre, sino que también involucra a la comunidad y estudiantes universitarios en la toma de muestras y análisis, contribuyendo así al desarrollo científico local y fortaleciendo las capacidades de investigación en la región.
La profesora Matta menciona que “además se busca crear conciencia entre las comunidades locales sobre los riesgos para la salud asociados con la caza, la manipulación y el consumo de carne silvestre, por lo que los primeros hallazgos arrojan luces para futuras investigaciones e implementación de medidas preventivas en la región; también esperamos que los resultados finales del estudio sirvan como una herramienta educativa para promover prácticas alimentarias más seguras y sostenibles en la región”.
Además, la colaboración entre instituciones académicas y entidades gubernamentales es fundamental para garantizar la salud pública y el bienestar de las comunidades rurales en toda la región de la Orinoquia.
Enfoque crucial para la salud pública
En la lucha de las enfermedades zoonóticas, la vigilancia y el control de epidemias emerge como un pilar fundamental para la salud pública. Es común el estudio de enfermedades tropicales transmitidas por picaduras de insectos, como dengue, malaria, chagas, entre otras, y una de las grandes alertas es su rápida y elevada transmisión; en este sentido, la vigilancia de microorganismos ha estado enfocada en agentes de común aparición, por eso es necesario analizar otros agentes que puedan provocar zoonosis en los humanos.
La extensa zona rural del Casanare, su gran biodiversidad, las costumbres y hábitos de sus pobladores –como la caza y el tráfico de animales– condicionan la presencia de organismos potencialmente infecciosos para el ser humano, de los cuales hasta el momento existe poca información e investigación.
De hecho, según un estudio previo de la Universidad de La Salle, realizado en Paz de Ariporo, las garrapatas presentes en chigüiros pueden transmitir enfermedades rickettsiales a los humanos, como neumonitis intersticial, miopericarditis (trastornos del corazón y vasos sanguíneos), lesiones cutáneas, meningitis linfocitaria, así como afectaciones hepáticas, renales y gastrointestinales, lo que sustenta la importancia de estudiar los riesgos asociados al cazar y manipular la “carne de monte”.
Esta investigación fue una de las ganadoras de la convocatoria del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (Minciencias) que busca promover la investigación, el conocimiento y desarrollo de capacidades regionales. Además es financiado con recursos del Sistema General de Regalías en colaboración con el departamento de Casanare.
Fuente: Comunicaciones UNAL sede Orinoquia
REGIÓN
Se activan alertas por intensificación de temporada de lluvias en la Orinoquía colombiana

Corporinoquia informa qué debido al incremento de las precipitaciones en gran parte de la región de la Orinoquía colombiana, se han emitido múltiples alertas hidrológicas y de deslizamientos para varios municipios de los departamentos de Casanare, Arauca, Vichada, Cundinamarca y Boyacá.
Resumen de la situación:
– Incremento de precipitaciones: Se pronostican aumentos del 10% al 30% en las lluvias para los meses de mayo y julio. Junio se mantendrá dentro de promedios históricos.
– Alerta hidrológica: Probabilidad alta de crecientes súbitas en cuencas de los ríos Meta, Guayuriba, Humea, Upía, Túa, Cusiana, Cravo Sur, Pauto, Casanare, Ariporo y otros afluentes, con especial atención en más de 30 municipios.
– Eventos recientes: Se reportaron desbordamientos del río Charte (Maní) y creciente del río Unete (Aguazul) con afectaciones locales.
– Alerta por deslizamientos: Riesgo elevado en zonas de ladera.
Recomendaciones para Consejos Municipales y comunidad:
1. Identificar sectores con mayor susceptibilidad a crecientes súbitas y deslizamientos.
2. Mantener vigilancia constante en zonas de ladera y cauces de ríos.
3. Socializar con las comunidades las señales de peligro y medios de contacto de las oficinas de emergencia.
4. Actuar bajo los principios de prevención, autoprotección y solidaridad, conforme a la Ley 1523 de 2012.
Llamado a agricultores y operadores de servicios públicos:
Se exhorta a mantenerse informados con los reportes actualizados del IDEAM y a seguir las recomendaciones emitidas por los entes territoriales.
Fuente: Comunicaciones Corporinoquia
REGIÓN
GeoPark anuncia cuatro nuevos proyectos de inversión social en Casanare y Meta

GeoPark continúa fortaleciendo su compromiso con el desarrollo territorial de las regiones de Colombia a través de la ejecución de nuevos proyectos bajo el mecanismo de Obras por Impuestos (OxI), aprobados por la Agencia de Renovación del Territorio (ART) junto con los ministerios de Educación y de Transporte.
La inversión aprobada para este año supera los 26 mil millones de pesos y beneficiará a más de 22.400 habitantes de municipios ZOMAC (Zonas Más Afectadas por el Conflicto Armado) de los departamentos de Casanare y Meta.
En el departamento del Meta, GeoPark ejecutará por primera vez un proyecto bajo el mecanismo de Obras por Impuestos. Se trata de una iniciativa de fortalecimiento educativo, que dotará con implementos culturales a siete instituciones educativas del municipio de Puerto Gaitán.
En Casanare desarrollará tres iniciativas: la pavimentación de 2.1 kilómetros la vía que conecta la vereda La Venganza con la Marginal del Llano en el municipio de Tauramena; en alianza con Parex, la rehabilitación del puente La Tarqueña sobre el río Tacuya en Tauramena; y la dotación de mobiliario escolar para mejorar la calidad educativa en 21 sedes rurales de instituciones escolares de los municipios ZOMAC del departamento.
Estos nuevos proyectos se suman a los esfuerzos ya adelantados por GeoPark en 2024, en los que la Compañía invirtió más de 18 mil millones de pesos en iniciativas que hoy benefician a más de 5.600 personas en los municipios de Hato Corozal, Paz de Ariporo y Monterrey. Gracias a este mecanismo, la Compañía en los próximos meses entregará soluciones solares fotovoltaicas a más de 1.000 viviendas rurales y obras de mejoramiento de infraestructura a 39 instituciones educativas.
En Putumayo, como resultado de una inversión de más de 13 mil millones de pesos a través del mecanismo de OxI, GeoPark dotó 39 Centros de Desarrollo Infantil (CDI) del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y 168 restaurantes escolares, mejorando la calidad de vida de más de 8.000 niños y niñas y sus familias.
“Estamos convencidos de que la energía además de impulsar el crecimiento económico es una poderosa herramienta de transformación social. En GeoPark, vemos en el mecanismo de Obras por Impuestos una vía concreta para traducir nuestra responsabilidad fiscal en proyectos tangibles que mejoran la calidad de vida de las comunidades vecinas a nuestras operaciones. Seguimos apostando por un desarrollo territorial sostenible, trabajando de la mano con las comunidades y el Estado para cerrar brechas y construir un futuro más equitativo para miles de familias rurales”, señaló Aníbal Fernández de Soto, Gerente de Naturaleza y Vecinos de GeoPark.
Con estas inversiones, GeoPark reafirma su rol como aliado del Gobierno Nacional y de las comunidades en la construcción de soluciones sostenibles, que contribuyen al cierre de brechas y promueven un desarrollo más equitativo y resiliente en los territorios donde opera.
Fuente: Comunicaciones GeoPark
REGIÓN
IDEAM predice que en junio lloverá un 50% por encima de lo habitual en la Orinoquia

Las lluvias en junio estarán un 50 % por encima de lo habitual en la Orinoquía, de acuerdo con el último boletín de predicción climática del IDEAM. Mientras tanto, en mayo, las precipitaciones seguirán dentro del rango histórico normal, consolidando el inicio de la temporada invernal. Así se dio a conocer este lunes durante el Consejo Departamental de Gestión del Riesgo (CDGRD) desarrollado en la Gobernación de Casanare.
Igualmente, se informó que el IDEAM mantiene la alerta roja por altos niveles en los ríos Upía, Túa, Pauto y Cusiana, mientras que ocho municipios están en riesgo alto de deslizamientos: Aguazul, Monterrey, Nunchía, Sabanalarga, Tauramena, Támara, Villanueva y Yopal.
Para mitigar estos riesgos, las autoridades recomendaron evitar construir o habitar en zonas de alto riesgo, mantener limpios desagües y canales, y acatar las alertas tempranas. Frente a los deslizamientos se sugirió monitorear taludes inestables, establecer rutas de evacuación y no realizar intervenciones en terrenos saturados.
En temas de salud, la Secretaría de Salud en cabeza de Tatiana Chávez, presentó el plan de contingencia para la fiebre amarilla en este departamento. Aunque en Casanare no se han confirmado casos, cinco de seis sospechosos fueron descartados. El plan aprobado por el CDGRD busca fortalecer la prevención, control y mitigación del virus, e incluye lineamientos para prevenir arbovirus como dengue y fiebre amarilla en eventos masivos.
Por su parte, el director de Gestión del Riesgo, Guillermo Velandia, informó que el departamento cuenta con un contrato de maquinaria para intervenir los 78 puntos críticos identificados en Casanare. Estas acciones buscan garantizar la seguridad de las comunidades y minimizar los efectos del invierno.
Fuente: El Diario del Llano – HOLA Casanare